Algunos hemos dedicado gran parte de nuestra existencia a integrar en el mundo de las organizaciones el Modelo Emocionalmente Inteligente, convencidos de que conjura el bienestar de las personas con su rendimiento, el crecimiento interior del ser humano con el desarrollo de las empresas.
Hemos valorado la importancia de cambiar viejos paradigmas para mejorar nuestra fuerza de trabajo y nuestra capacidad de crear riqueza y de reforzar nuestro estado de bienestar, y de pronto todos aquellos valores que daban forma a nuestra voluntad de cambio se han convertido en un empeño viejo y trasnochado que no sirve más que para alimentar buenas intenciones.
Porque ahora toca moverse sin mirar atrás, para no convertirnos en estatuas de sal como como la mujer de Lot cuando la destrucción de Sodoma.
Todo aquello que teorizábamos convencidos de que era el progreso de la economía ahora debemos materializarlo con un nuevo código de conducta, que sume la determinación a la disciplina germánica (nunca mejor dicho).
El tiempo es la mejor moneda de cambio ahora, enseñemos a nuestros equipos a utilizarlo, sin preámbulos, investiguemos a nuestros compañeros de juego, enseñemos nuestras cartas y si ganamos, estupendo, y si no ganamos, sigamos jugando, juguemos hasta ganar, no vendamos, sólo juguemos.
Todo aquello que deseábamos para nuestro futuro ahora necesitamos que pase, porque el futuro ha llegado sin avisar.
THOMAS KUHN: ..los paradigmas pierden validez históricamente cuando se multiplican las anomalías, es decir, cuando son más los casos en que no se da lo previsto que aquellos en los que sí se cumple….el paradigma presente queda inservible y se hace necesaria una nueva forma de validez..
Es posible que haya llegado el momento de hacernos plenamente conscientes de que, de una vez por todas:
.- El poder de la acción ha sido sustituido por el poder del conocimiento.
.- Los recursos ahora más que nunca son sólo un PC.
.- La digitalización nos posiciona en el mercado, si no hay digitalización no hay mercado.
.- Los líderes mandaban, hoy empoderan.
.- La madurez era un estatus, hoy la creatividad crea progreso.
.- Hemos pasado de las normas internas, a un entorno VUCA + IF, (años 90, fin de la guerra fría) volatilidad, incertidumbre, complejidad, ambigüedad, más inmediatez y fricción (con quién hoy compito, mañana puedo asociarme)
.- La inmediatez ha sustituido al riesgo.
.- Los proveedores competían, ahora forman parte de la cadena de valor.
.- La capacitación era un gasto, el talento es una inversión.
.- La estrategia era un coste, ahora es una inversión a futuro.
.- Los datos eran caros, ahora se analizan y son una oportunidad.
.- Conozcamos profundamente al cliente antes de cambiarlo por otro.
.- La jerarquía ha sido sustituida por la redarquía y la inteligencia colectiva de tu organización.
Fase 1.- identifiquemos, renovemos, argumentemos nuestra propuesta de valor.
Fase 2.- ofrezcámosla al mundo entero a través de más canales que nunca.
Fase 3.- consensuemos un tiempo de prueba y cambiemos nuestra propuesta de valor si no funciona.
Y volvamos a empezar, una y otra vez, con la convicción del replicante que sabe que su tiempo de actividad está limitado.
Y cada día, comprobemos la dirección del viento para aprovechar su impulso.
Que la fuerza nos acompañe.
JUAN MIGUEL GASPAR (Adjunto a la Dirección de Desarrolla)